En los últimos meses se ha difundido abundante información sobre el registro de visitas del ex ministro de Energía y Minias, Eleodoro Mayorga, en su despacho. Cabe indicar que el despliegue informativo se centra en las reuniones del ex titular de esa cartera con la empresa Odebrecht, ganadora de la licitación del proyecto Gasoducto Sur Peruano. 

El enfoque revela, en opinión de diversos congresistas, comentaristas locales y ex funcionarios, que dichas reuniones de por sí ya configuran actos sospechosos orientados a supuestos favorecimientos a la constructora brasileña.

Sin embargo, según señala, el sociólogo y asesor del Gobierno Regional de Puno, Julio Condori - uno de los impulsores desde la sociedad civil de esa región de la construcción del Gasoducto Sur Peruano - la revelación de la agenda del ex ministro Mayorga, a todas luces se hizo de manera sesgada, como dando la impresión que sólo se habría reunido durante el proceso de licitación con los funcionarios de Odebrecht y no habría recibido a nadie más.

“Hemos revisado el registro oficial de visitas del Ministerio de Energía y Minas durante los primeros cuatro meses del año 2014, se puede comprobar allí que el ex ministro Mayorga también atendió a integrantes de otros consorcios interesados en competir en esa licitación. Pero nadie se ha preocupado por informar de manera correcta y equilibrada, por ejemplo, cuantas veces los representantes de empresas como GDF Suez, Sempra, Techint , Pluspetrol, TGP, Shell, Hunt Oil, Repsol, entre otras, estuvieron en el despacho de Mayorga”, indicó.

Condori enfatizó en que en la región Sur se empieza a ver que está en marcha una campaña destinada a la desestabilización y paralización del proyecto. “Esa campaña se materializa mediante denuncias e informaciones sesgadas. Si hay temas que investigar que se investigue de manera transparente, pero que no se afecte la viabilidad del proyecto. Estamos viendo, cómo se quiere predisponer la opinión pública con las reuniones del ex ministro Mayorga”, sostuvo.

“Estamos evaluando los hechos. Vemos que hay grupos interesados en seguir manteniendo el monopolio del gas en el país, concentrando ingentes beneficios sin importar que la población del Sur hasta ahora no acceda a ese recurso fundamental para mejorar la condición de vida de millones de peruanos”, precisó.

El Gasoducto Sur Peruano, es un clamor de la macro región Sur, hace más de diez años que el gas de Camisea llega a la costa, mientras nuestra población de las zonas alto andinas solo ven el trazo por donde pasa el tubo que lleva ese recurso a otros lugares sin la menor posibilidad de acceder a su uso, señaló.